viernes, septiembre 12, 2003

Erase una vez una dulce niña de unos doce años aproximadamente. Todos los que la conócian la llamaban caperucita roja, no porque llevase siempre una caperuza de ese color, sino xq recientemente habia teñido su pelo de color carmesi. Estaba esta niña en casa viendo embrujadas tirada en el sofa, cuando su madre, que entre limpiar, cocinar y atender a su prole estaba asfixiada de trabajo, la mando a hacer un recado. Tenia que ir a la farmacia, recoger las multiples medicinas de su abuela, y llevarselas a casa.
Entonces su mente intento makinar una excusa, no dando con ninguna. Descarto lo de los deberes, xq no la apetecian. Descarto el "he quedado" xq entonces no saldria. Y se decidio a ayudar a su madre, xq este sabado queria ir a la discoteca con sus amigas, y era la mejor manera de camelar a su antecesora.
Con las mismas, se subio en sus plataformas, se puso la cazadora de las tanga girls y se dispuso a salir a la calle. no sin antes escuhar, eso si, en la letania y sin prestar atencion, a su madre diciendola que tuviese cuidado con nosequien.
Saliose de su casa en direccion a la farmacia y parose delante de un grupo de jovenes en celo con la excusa de pedir un cigarrillo. Y asi, echando humo, y con la sonrisa victoriosa de quien ha triunfado, prosiguio su camino hacia la farmacia.
Al salir de ella, un yonki conocido por el barrio se la acerco. " Caperucita, caperucita, a donde vas, caperucita" " y a ti que coño te importa, dejame pasar" "Caperucita, que es lo que llevas en la bolsita?" " un ak47 para defender de los pesados que se crucen por mi camino" "caguendios caperucita, como puedes ser tan borde, son me dicinas? ey dame algo, lo estoy pasando muy mal" y con una mirada de odio indiferente, sin contestar, caperucita comenzo a andar cabreada con nuestro lobo yonki, por hacerla perder el tiempo.
El lobo se sintio indignado. Si no queria ayudarle era suficiente con decirselo, pero no tenia porque tratarle tan mal, Niñata, que se habia creido. Necesitaba esas medicinas, sabia de sobra que habia calmantes capaces de mitigar los dolores de parto de un tiranosaurio, y eso es lo que el ansiaba.
Camino tan rapido como pudo, cruzo callejas, tropezo con gente y llego a casa de la abuela de caperucita, Seguro que la muy guarra se habia vuelto a parar con algun chavalin. Subio las escaleras y pegandole la patada a la puerta entro en casa de la abuela. La abuela asustada intento gritar, estaba haciendo calceta y blandio amenazadoramente sus agujas de punto a modo de defensa personal. Pero el lobo era mas fuerte, asi que se las arrebato e hizo de ella un pincho moruno.
Vistiendose tan rapido como pudo con las ropas de tan vetusta dama, se sento en el sillon de la abuela esperando la llegada de caperucita.
Esta llego, y asustada por el estado de la puerta se acerco corriendo a ver si le habia pasado algo a la abuelita, la dio un beso y.. toda morada... le pregunto " Abuelita abuelita, que barba tan rasposa tienes" "la menopausia hija, estas hormonas que ya no circulan" "abuelita a buelita y que delgada te veo" " es que no tengo gana, comer sola, sin sal, vamos que no me apetece" "abuelita abuelita que pupilas mas dilatadas tienes" "la luz hija la luz, mis viejos ojos no estan acostumbrados" Abuelita abuelita y que voz tan grave tienes" "mira niñata de mierda, ni yo soy tu abuela ni tengo ganas de seguir jugando" Asi que atravesose el cuerpo de la jovencita de similar manera a como lo hizo con la abuela y avalanzose sobre la bolsa de medicinas.
Tres cuartos de hora despues un vecino alarmo a la policia. en el tercero derecha habia tres cadaveres. Una anciana, una joven de pelo rojo, y un drogadicto transexual que, arrepintiendose de sus actos, se habia suicidado con una sobredosis de tranquilizantes. O al menos, eso fue lo que dijeron en la tele.
Y colorin colorado, este cuento... se ha acabado!

jueves, septiembre 11, 2003

Os voy a contar algo, hecho de menos a mis abuelos. Recuerdo el llegar a casa del cole o del trabajo y la alegria de mi abuela mientras entre las dos destripabamos al profesor/jefe que tocase ese dia. Sus historias, muy al estilo abuelo simpson, que se hacian eterna, enlazando anectotas. Recuerdo el llegar a casa y que mi abuelo, haciendo grandes esfuerzos, se levantase a todo correr para darme un abrazo y decirme lo muy orgulloso que estaba de mi. Recuerdo demasiadas cosas, todas con muchisimo cariño, y eso hace que les eche mucho de menos.
Al menos ellos no fueron unos de esos pobres ancianos abandonados, por hijos, nietos, hermanos, familia al fin y al cabo, que han dejado de quererles. Que su ritmo de vida impera sobre sus seres queridos, abandonandoles en la cuneta de su existencia. Se me llena el corazon de lagrimas cuando veo eso, no lo puedo remediar.
Miro hacia atrás y veo demasiados años pasados. Recuerdo mi infancia, retazos solamente. Recuerdo la crudeza del campo, los atillos de leña a mi espalda. Recuerdo la mano firme de mi padre que me enseñaba como plantarle cara a la vida. Recuerdo mi juventud, en el campo tambien. Mi boda y mi primer hijo. El primero, los otros seis vendrian despues. Recuerdo como se me llenaban los ojos de paciencia viendo como mi mujer, en estado, recogia el esparrago. Manos encalladas y espaldas torturadas. Ella ya no esta. Tambien recuerdo el dia de su muerte. Hijos nietos, nuestro primer bisnieto. Todos lloraban la perdida. Y aunque por mi rostro no corrian lagrimas, todos sabian que yo era quien mas lloraba. Por lo vivido, por lo que no vivimos, y por lo que me quedaba por vivir.
Ese fue el dia en el que el abuelito se convirtio en una carga. He trabajado bajo tormentas, durante guerras, cuando la hambruna amenazaba mi familia. Dias y noches, procurandoles sino lo mejor, todo lo que mi humilde mano podia alcanzar. Les enseñe todo lo que pude, cuide de mis hijos contra viento y marea. Y de mis nietos, xq... como ha cambiado la vida. Ya no puede uno ni encargarse de sus hijos. Y ahora soy una carga. Me quieren, creo, pero no quieren vivir conmigo.
Sentado aqui en el parque veo la gente pasar. En las arrugas de los muchos que por aqui andan veo recuerdos de tiempos pasados. Y en las sonrisas inocentes y llenas de amor de los otros menudos veo la esperanza del tiempo futuro. Espero que ellos aprendan de mi, tanto como yo aprendi de los mios. Y asi puedan plantarle cara a la dura vida.

miércoles, septiembre 10, 2003

Comienzo a despertarme. Una tibia luz matinal, de la que hace da?o de verdad, se cuela por las rendijas que la desvencijada persiana deja libres. Una silla, con la ropa maloliente del del dia anterior descansa en la esquina opuesta. Un armario, vacio, de puertas abiertas, da un aun mas lugubre aspecto al lugar. A mi lado, una mesilla a juego con el corroido mobilia. Un vaso, una botella de whisky, un revolver y mis ganas de vivir.
Me incorporo lentamente, cuidando todos mis pasos, ordenando todos mis pensamientos, con sumo cuidado de no alterar nada en este mi microcosmos. Bebo un trago, me ayudará a despertarme. Sin dilacion voy hacia la ventana, subo la persiana y al abrir, no to como el aire fresco de la mañana se va colando por mis poros, reavivando mi sangre, moviendola, al menos. Vo y hasta la silla y alisandolo con la mano intento arreglar un poquito el uniforme. Me lo pongo. Mi madre siempre ha dicho estar orgullosa de mi. Este uniforme es la causa. Cojo el revolver, un dia más, espero no tener que usarlo hoy tampoco.
Cierro la puerta sin mirar atras y pensando en el café que me espera comienza mi largo dia de policia municipal.
:)

martes, septiembre 09, 2003

Comienzo a despertarme. Una tibia luz matinal, de la que hace daño de verdad, se cuela por las rendijas que la desvencijada persiana deja libres. Una silla, con la ropa maloliente del del dia anterior descansa en la esquina opuesta. Un armario, vacio, de puertas abiertas, da un aun mas lugubre aspecto al lugar. A mi lado, una mesilla a juego con el corroido mobilia. Un vaso, una botella de whisky, un revolver y mis ganas de vivir.
Me duelen todos los huesos, si es que queda alguno entero, y al intentar incorporarme recuerdo todo lo ocurrido. Hasta ayer mi vida era normal. Trabajo, amigos, las partidas de poker de los sabados. Una vida sin sobresaltos... hasta ella. Cuando ella entro en mi vida todo cambio. Al principio era feliz, luego era adicto y mi adiccion acabo mal como era de esperar. Si ella no me lo hubiese pedido, si ella no hubiese insitido, yo seguiria trabajando, jugando al poker y dando largos paseos. Pero no, ella tenia que ganar, que acabar con la vida de la persona que, de una manera u otra, la habia estado utilizando. Y era yo quien debia empuñar el revolver. Su imagen seguiria limpia, mi vida, casi acabada, se libraria asi de tan pesada carga.
Lleno el vaso. Bebo dos largos tragos. Empuño el revolver. Sin dilacion quito el seguro, lo introduzco en mi boca y de un solo golpe de dedo termino con esta historia, ella ha ganado, yo he perdido. conciencia limpia.

lunes, septiembre 08, 2003

Sentimientos encontrados luchan en mi cerebro. Que no en mi corazon, xq por muy sentimientos que sean mi corazon pasa de todo... late, que ya es suficiente. Pros y contras, bien y mal, ying y yang. Una soberana putada, vamos. Si no fuesemos racionales todo sería tan simple... hambre --> comer, sueño--> dormir, te mueres-->te ha tocado, te rompes una pata--> te jodes y a tirar pa lante. Pero no, ale, razon y a vivir con ello. Y es que la vida es asi, elegir y acertar o caer. No me gusta poner cosas muy personales aqui, pero bueno, un dia es un dia. Pongamos como ejemplo la historia esa de la compañera que me puteaba. No la soportaba, a veces hasta la habría cruzado la cara, y sin embargo me sentia fatal y me siento culpable por tener esos sentimientos. Xq? xq yo en su situacion estaria hundida en la miseria cortandome las venas con los dientes. Admiro su coraje, odio su forma de ser. Conclusión, sentimientos encontrados, te toca elegir una de las dos actitudes. Gran putada.
Y asi dia tras dia. Hoy por ejemplo me toca estar triste. Normalmente siempre estoy alegre, o cabreada en su defecto, pero hoy toca estar triste. Pues no me dejan. No quiero verte asi, esto no es normal, continuos que te pasan... vamos, que pasas de estar triste a agobiada. Por un lado estas en tu derecho de sentirte como te salga de los ovarios. Por el otro sabes que la gente se preocupa por ti y que a algunos le spuedes estar haciendo daño solo con verte asi. Conclusion, decidir entre egoismo o resignacion. Otra gran putada.
Demasiada dualidad para mi body. Demasiadas elecciones para mi cerebro.